Obras del Eurotúnel continúan en Ilobi

Con la ayuda de Idoia y Josu (ADES), Rubén (Takomano), Antxonio y Eneko (GEMA) organizamos otro ataque al sifón superior. Esto sí que fue un ataque en toda regla por tierra, mar y aire, y no lo de las tropas aliadas y la aviación rusa de estos días en Mosul.

¿Que no? Hasta achicar agua a botes estancos hicimos, ¡en serio!.

El primer equipo, Eneko y Antxonio, tras descartar acercarse por la cabecera del último pozo, intentó la escalada justo encima del sifón. Negativo.

El segundo – Josu y Rubén- siguió peleándose con el meandro que nos había llevado hasta allí. Estaba claro que ese día no respiraba nada, pero una vez allí había que intentarlo… Al final de la tarde, picando un poco por allí y un poco por allá, consiguieron colarse. Un pequeño destrepe daba acceso a un meandro estrecho, en forma de ojo de cerradura, que unos 20 m más adelante comenzaba a reducirse para acabar inundándose por completo. Descartado también.

El equipo de las chicas – Idoia y María -, tras estudiar la cuestión y preparar cuidadosamente el terreno con unas cuantas presas, se lanzaron a vaciar el sifón. Si la última vez estaba bajo, en esta ocasión lo estaba aún más. No íbamos a tener una ocasión mejor. Unos 100 viajes de bote estanco a la presa superior después, y con el sifón totalmente drenado… alguien tuvo la inspiración de intentarlo por el tapón de sedimento de la derecha. Al menos estaríamos secos… Por turnos, fuimos excavando y extrayendo barro, calculo que más de un metro cúbico. Unas 3 o 4 horas después, agotados los ánimos y sin resultados claros, tuvimos que darnos por rendidos.

¡Se ha perdido una batalla, pero no la guerra! Yo, al menos, pienso dedicarle otra sesión… (¡si después de este post consigo encontrar un acompañante!)

Continuará…

 

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